La veleta ha sido colocada en la torre

    El día 23 de enero, después de muchas esperas motivadas por el mal tiempo, fue colocada en lo alto de la torre la piedra central y con ella la veleta. No hemos tenido ocasión de verla pero en palabras de quien nos ha informado "luce espléndida".
      Ahora podremos mirar con orgullo nuestra torre sin sentirnos avergonzados de su precario estado.
       Desde estas páginas queremos agradecer a todos los que de alguna manera han contribuido para lograr conseguir un objetivo, que era el deseo de la mayoría.
       Seríamos injustos, si no reconociéramos la labor desarrollada por nuestros representantes municipales, que se han implicado hasta el fondo, corriendo el Ayuntamiento con todos los gastos derivados de la confección de la piedra y colocación  de la veleta.
                                                                       A todos........gracias.

    A continuación os ponemos las fotos con la evolución que ha seguido nuestra torre. En primer lugar una foto antigua con la veleta en todo su esplendor, la siguiente es de cuando se cayó la veleta y un trozo del bolo central, la tercera cuando ya estaba caído el resto del bolo central y el derecho y........las últimas con la torre reconstruida. Deberán pasar bastantes años hasta que adquiera el tono verdoso que tiene el resto de la torre pero todo se andará.

Foto colaboración de Miguel Angel Conejo de Pedro
Foto antigua de la torre con su veleta

Foto colaboración de José Carabias

SALUDO A LA VELETA 
(A la veleta de Luelmo, colocada de nuevo en su lugar)

   Vuelves a estar altiva en tu peana
limpia y desnuda a merced del viento.
EL pueblo, tu lección, con gran talento,
comprendió, y apostó de buena gana.
   Ha vuelto a ver la luz el peregrino
que a oscuras se quedó buscando el cielo.
Has devuelto la fuerza y el consuelo
para seguir  ferviente su camino.
   De gala se ha vestido la espadaña.
San Pedro, tu patrón, a buen seguro,
También está contento; pues auguro
que su torre, sin ti, veía extraña.
   Vuelves a estar, cual viejo centinela,
oteando sufrida, cuán paciente;
siempre de Norte a Sur, de Este a Poniente
dominando tu amplísima parcela.
   Has vuelto a ver tus viejas compañeras
reliquias de los pueblos de Sayago,
cada cuál vigilante de su pago,
unidas por la fe, sin más fronteras.
   Lleva la nueva con amor sencillo
a todas tus hermanas sayaguesas;
desde "GRACIA" regazo de promesas,
hasta "NUESTRA SEÑORA DEL CASTILLO"
   Y cuéntale; tú que bajaste al suelo
no sabemos si en paz o en son de guerra,
dónde se está mejor, caída en tierra
o en lo alto besando casi el cielo.
   Ya puede "Internet", tenaz viajera
mostrarte sin complejos, orgullosa,
en nombre de esta tierra laboriosa,
por todos los confines de la esfera.
   Quédate ya por siempre, sin rubor,
en tu puesto envidiable de la altura
adornando tan recta arquitectura.
Y no nos des más sustos. Por favor.
   Que seas compañera, noche y día,
del esfuerzo constante de tus gentes;
y seas para todos los ausentes,
la luz para volver. Su norte y guía. 
          
      Obdulio HERAS IGLESIAS              
             2-02-03                                 

 

Ésta sí es nuestra torre