DISFRUTANDO HACIENDO EL FUEGO PARA PREPAR LAS BRASAS Y LA BARBACOA.

     Bien vamos a preparar un pescadito a las brasas, por ejemplo un buen chicharro de esos que cuando los ves en el mostrador de Colino, lo primero que piensas es:  lo siento en el alma, pero hoy voy a pasar una buena tarde contigo. Esta forma de preparación nos puede servir también para cualquier tipo de pescado, carpas, tencas, sardinas, en fin el que queráis, pero hoy nos centramos en el chicharro, un pez que, por su bajo coste, siempre ha sido considerado humilde, pero muy rico por su contenido en ácidos grasos omega 3 y además contribuye a reducir los niveles de colesterol,  también reduce el riesgo de aterosclerosis y en la formación de trombos, como veréis es interesante.

     Bueno, pues vamos a prepararlo de forma sencilla, pero espectacular en el plato.

    Para 6 personas nos harán falta, si lo tomamos acompañado de una buena ensalada, a un chicharro cada uno, procurar que estén frescos, de color plateado brillante, ojos que cuando los miras tienen un brillo vivo, y la cola algo levantada hacia arriba, no seáis mal pensados, simplemente es un chicharro.

  8 dientes de ajo, un poco de guindilla, medio vaso de vinagre, sal y un buen aceite de oliva, y unas ramitas de perejil.

    Primero limpiaremos los chicharros, si se lo decimos a Colino nos los prepara como queramos, yo soy de los que piensan que el pescado cuando sale del agua, hay que procurar que no la vuelva a tocar, si hay que limpiar algo, pues se puede hacer con servilletas de papel, pero bueno esto es cosa mia, bien una vez limpio, lo ponemos en la parrilla abiertos hacia abajo, con poca sal  y lo ponemos sobre las brasas, esto en unos pocos minutos estará hecho, también decir que preparar unas buenas brasas tiene su ritual, es imprescindible estar acompañados de buenos amigos y por supuesto una botellita de vino para  ir amainando  el calorcito. Súper importante, una bandeja hermosa o dos si hace falta, el que sea un pescado humilde no significa que no pueda tener una puesta en escena como se merece! EL CHICHARRO! Vale, y para rematar la tarde, una vez colocados los chicharros en sus aposentos, prepararemos un buen refrito, con los ajos, la guindilla si nos gusta. Y ahora llega el momento crítico del cual depende el éxito del plato, echaremos un buen chorretón de vinagre sin miedo, y acto seguido, los ajos, es imprescindible que oigáis ese sonido característico entre la unión del vinagre y el aceite, algo así como, ¡! CHISSSSSSSS!! Y si queréis rizar el rizo, pues volvéis a echar con cuidado la salsa de la bandeja otra vez a la sartén, le dais un calentón, y lo volvéis a echar sobre los chicharro, rociarlos con una pequeña lluvia de sal gorda, os puedo asegurar que es aquí cuando me quedo sin palabras, si lo hacéis, entonces seguro que lo entenderéis.

     Bueno chicos y chicas, no olvidéis que la cocina sencilla casi siempre es la mas sabrosa, hay que ver lo que da un simple chicharro.